sábado, 3 de enero de 2009

ACCIDENTE FERROVIARIO

El 3 de diciembre de 1.940, un tren expreso salía de Barcelona y a la misma hora lo hacía otro de Madrid. Deberían cruzarse a la altura de la localidad de Velilla de Ebro(Zaragoza), pero algo falló, ya que en vez de cruzarse chocaron frontalmente, produciéndose un grave accidente. Una mujer que estaba muy cerca, pero con el Ebro de por medio, presenció el choque y lo contó de la siguiente manera:
-Yo estaba limpiando borrajas delante de la ventana. Me gusta salir fuera a esa hora cuando no tengo nada que hacer porque pasan trenes de los grandes.
Ese día los dos a la vez. El de Madrid por ese lado y el de Barcelona por el otro. Así al principio no pensé. Los veía venir y... !Zas! Por el aire. Me quedé... y veía los vagones para arriba.Otro para un lado. Y yo parada como tonta. Ni dejaba de mirar ni nada.
Y luego, de pronto el fuego. Claro, la locomotoras.
Yo no sabía qué hacer cuando me di cuenta de lo que estaba pasando ahí mismo, justo al otro lado del Ebro, que por cierto venía cargadico lleno de agua. Aquí no hay ni barca ni nada para cruzar. Cuando queremos pasar al otro lado pues tenemos que ir hasta Gelsa y cruzar el puente. Ahora está medio arreglado pero en la guerra lo destrozaron. Luego coges el camino de La Zaida y vuelta para acá. Montaron tiendas y un hospital de urgencias muy grande, pero de tienda de campaña, en nuestras tierras.
Así, de primeras, más de 40 muertos. Aplastados, quemados y partidos por la mitad. Manuel y mi Manolo cogieron el carro y para Gelsa, y yo desde aquí viendo a aquella pobre gente. Desde aquí oía los gritos pero no podía hacer otra cosa que mirar. Más de dos horas tardaron en llegar allí los míos. Antes habían empezado los camiones y un tren de Zaragoza.
Al pueblo, a Velilla, trajeron muchos, los que estaban mejor, y llevamos mantas y colchones.
En el río montaron una cosa con unas ruedas y pasaban con unos cables tan gordos como mi dedo. Le daban a una palanca y se movía como una balsa pero que no tocaba el agua.
Vinieron autoridades de Zaragoza, Barcelona y Madrid. No me digas para qué. Porque hacer no hacen nada. Luego se van en sus automóviles y a otra.
!Madre mía! Con el habla y habla se me ha ido el santo al cielo. Y todavía tengo la colada sin tender y las borrajas sin limpiar.
Cuenta una crónica de entonces que la temperatura era de 10 grados baja cero.

1 comentario:

cave-cane dijo...

buenas josemi soy jorge he estado echandole un ojo al blog y esta muy chulo josemi,he aprendido cosas que desconocia de mi pueblo y que seguro q les serviran ala gente para saber mas de este maravilloso pueblo,y no es por que sea el mio jejeje.sigue asi josemi